viernes, 2 de diciembre de 2011

¿Afecta a nuestra salud el nivel de bienestar que haya tenido el animal que nos comemos?

Acabo de leer un artículo en el 'PAÍS' sobre un tema que todos más o menos conocemos y más bien obviamos (y no me refiero a la política)


http://www.elpais.com/articulo/sociedad/Carne/canon/elpepusoc/20111128elpepusoc_11/Tes


Tampoco hace falta leerlo de cabo a rabo para entender lo que nos quiere decir, pero yo me quedaría con una frase de la autora: '¿Afecta a nuestra salud el nivel de bienestar que haya tenido el animal que nos comemos?' Obviamente no lo creo, por eso nunca se pregunta de dónde viene la carne de hamburguesa que nos comemos....Tampoco quiero hacer ahora un examen de conciencia ni deciros que nos hagamos vegetarianos, pero sí quería enseñaros otras alternativas que existen. 



Resulta que hace un par de semanas estuve en una finca dedicada a la explotación porcina extensiva, aquí en Córdoba, más concretamente en Pozoblanco. La finca nos la enseñó el hijo del ganadero que casualmente era agrónomo, y nos comentaba la problemática que tenían en el mercado. Para empezar, es obvio que tu jamón va a ser más caro, porque una explotación extensiva, una finca, implica más costes que una nave, y si además usas una raza ibérica pura, el cerdo te va a aguantar más, pues tarda más en engordar, con lo cuál, también te consume más gastos y por supuesto espacio. Claro que este impacto (un mayor precio en el producto) lo puedes minimizar en el consumidor alegando un producto ecológico, de cerdo ibérico puro. Además gracias a la trazabilidad se hace más fiable. Pero, ¿realmente esto es tan sencillo? Lo cierto es que no. El principal problema que tienen estos ganaderos no son los costes, es la venta, pues ellos bien pueden poner que su cerdo es ibérico puro y que ha sido criado en dehesas, pero resulta que las explotaciones intensivas no difieren tanto de estos adjetivos, ¿por qué? Pues porque resulta que la clasificación de cerdo es muy sencilla:


Cerdo Ibérico: cualquier cerdo descendiente de una cerda ibérica, esto es, que si mezclas una cerda ibérica con un cerdo cualquiera, tienes un 50% ibérico, y eso, podría ser admisible, pero resulta que luego mezclan ese 50% ibérico con otro cerdo cualquiera, y ahora tienes un cerdo 25% ibérico, y aún así, lo tachan de ibérico. 


Cerdo ibérico puro: un cerdo de padres ibéricos puros (ambos)


Esto puede parecer una chorrada, pero imaginemos por un momento que en vez de hablar de cerdos estamos hablando de aceite. ¿Qué pasa si mezclamos media botella de aceite de oliva y la mezclamos con aceite de girasol? Pues que lo llamamos aceite de oliva. Si tuviéramos una botella completa de aceite de oliva entonces la llamaríamos aceite de oliva pura. ¿A que parece un chiste?


Y seguimos con la clasificación:


Cerdo de cebo: es el cerdo alimentado con pienso


Cerdo de bellota: cerdo alimentado con bellotas y/o hierbas (vaya, en el campo) Siempre es de montanera


Cerdo de montanera: cerdo criado al aire libre (puede ser de cebo o de bellota)


Cerdo de recebo: cuando un cerdo llega a la edad de sacrificio pero no alcanza el peso mínimo se le 'receba', con pienso o bellotas. Pensad en que la diferencia en el producto es que consumimos un cerdo más viejo. 


Bueno, creo que no hace falta señalar como cambiamos la palabra 'pienso' por 'cebo', ¿influirá esto en la decisión del consumidor?


En resumen, resulta que si en una carnicería nos encontramos con un producto de 'cerdo ibérico de cebo', puede que el cerdo tenga de ibérico el blanco de los ojos, lo de cebo es a base de pienso y posiblemente haya visto la luz natural contadas veces en su vida, pero si queremos un cerdo de esos que salen en los anuncios con el paisaje idílico que sabemos que no existen, deberemos buscar 'cerdo ibérico PURO de bellota' (¡como si los cerdos no se alimentasen con bellotas!)



Como ya he comentado, no pretendo hacer un examen de conciencia, sólo haceros ver que no hay total transparencia en lo que compramos. Siempre se recurren a términos ambiguos que nos remiten a guiarnos por lo de siempre: el precio, que es lo que interesa a esos señores de las grandes industrias. Y total, ¿para qué? Al fin y al cabo, jamón no se compra todos los días y cuando se compra una pata, mejor que sea buena, ¿no?


Porque esos prados idílicos sí que existen:












3 comentarios:

  1. Grandioso, si señor!!! por una vez una entrada digna de leer!!!

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  2. 1º ¿Por una vez?

    2º ¿En serio? XDXD

    Pues a ver si ya voy pensando en actualizar, la verdad que ideas no me pueden faltar: no he parado...

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  3. tampoco te voy a pedir un tratado sobre la curación de los distintos tipos de carne que sale del cerdo, pero para un blog esta bastante bien ^^

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